«[…] Tango que fuiste la dicha/
de ser hombre y ser valiente./
Tango que fuiste feliz,/
como yo también lo he sido,/
según me cuenta el recuerdo;/
el recuerdo fue el olvido».
Este poema de Borges cantado por Edmundo Rivero no tiene desperdicio alguno. Lo debo a la amabilidad de mi querido amigo Borgeano (faltaba más). Con su cadencia inauguro el fin de semana…
palabras a flor de piel 
Bueno, qué puedo decir… Gracias, querida Danioska. La verdad es que desde que escuché ese disco no puedo leer esos poemas de Borges sino es con la voz de Rivero. Existe otra versión, más actual, cantada por Jairo, la cual no está mal, pero no es lo mismo; no llega a la altura de la original.
Una pequeña anécdota. Durante unos años trabajé en un restaurant en el centro de la ciudad. Era una casa antigua, de dos plantas. El restaurant estaba abajo y arriba había un café. Un tiempo después de haber comenzado a trabajar ahí me entero de que esa era la casa donde había nacido Astor Piazzolla. No significa nada, por supuesto; pero esas cosas a mí, al menos, me legran la vida.
Cariños infinitos y que pases un buen fin de semana.
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Sí, conozco la versión cantada por Jairo: a principos de año compré el disco en una tienda de Palermo SoHo. De hecho, si no recuerdo mal, en ese entonces escribí algo al respecto y fue cuando me contaste que existía la original de Rivero. Luego, todo un sol como eres, me la hiciste llegar digitalmente. Y sí, de acuerdo en que la de Rivero tiene el peso de ser «la buena».
Tu anécdota me encanta. Entiendo perfecto la emoción que generan «coincidencias» en las que uno se siente sintonizado con gente cardinal. Enriquecen la vida y la alegran sin más.
Abrazo fuerte
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Recordaba haber charlado contigo de estos discos, pero no los hechos puntuales. Lo del sol me lo quedo, gracias (Borgeano se sonroja y hace mutis por el foro).
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Qué rico, otra versión!! Gracias, gracias, querido. Me encanta el matiz que cada intérprete le da a los mismos versos.
Abrazo
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Qué rico, otra versión!!! Muchas gracias, querido, me encanta el matiza que cada quien aporta a un mismo texto.
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¡Qué contrapunto maravilloso con la Cassandra Wilson que me había sacado de la cama! Entre tú la Shira me habéis metido el tengo en la vena! ¿Qué escucharé ahora?
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Algo de tango habrá en el ambiente porque anoche estuve oyendo a Adriana Varela!
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Una bestia, esa mujer. Nunca agradeceré lo suficiente a una chica de las antípodas que, en una noche que se pierde en el mar de mi memoria, me regaló un cassette mal grabado con la Varela. Fue amor a primera escucha. Y el romance continúa.
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Sí, la Varela es un verdadero monstruo. Mi romance con ella también es perpetuo…
Beso
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