Por estas cinco razones estoy con la comunidad gay

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«[…] dije este hombre es mi hermano
y lo quiero
porque somos igual de pobres
y estamos igual de hambrientos».

Estos versos de Juan Carlos Bautista, del poema «Caín y Abel», dicen lo que pienso: estoy por la comunidad homosexual porque nuestras pobrezas nos acercan y nuestras hambres son hermanas.

Porque el amor entre dos, cualesquiera dos, merece un solo nombre sin adjetivos: amor.

Porque lo que urge erradicar de este país no es el amor ni el deseo sino la violencia que desgarra y injusticia que apesta.

Porque el cuerpo es exclusivo territorio de cada uno.

Porque cada quien debe poder decidir qué hace con lo que tiene entre las piernas.

 

 

 

Publicado por Julia Santibáñez

Me da por leer y escribir. Con alta frecuencia.

8 comentarios sobre “Por estas cinco razones estoy con la comunidad gay

  1. Y punto. Parece mentira que debamos poner en negro sobre blanco algo tan básico, tan elemental. Como dijo alguna vez Bertold Brecht: «Qué tiempos serán los que vivimos que debemos defender lo obvio»; y también aquella otra de Chesterton: «Llegará el día en que será preciso desenvainar una espada por afirmar que el pasto es verde». Sea como fuere, no hay que bajar la guardia ni un instante y la pelea debe darse de manera constante y en todos los ámbitos; de allí que esta entrada sea digna de aplauso.

    Abrazos.

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    1. Enorme, la frase de Brecht y tu apunte a la misma. Y no vayamos más lejos: ahora mismo, el tipo de Twitter encontró más importante centrarse en mi uso de la palabra «comunidad» que en el fondo del asunto. AyDios, estamos de atar.
      Gracias, querido. Cómo saben de bien tus abrazos que lo entienden todo, sin tener que precisarlo.

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    2. Tío, Chesterton se debe estar retorciendo en su tumba por haberlo citado en esta entrada. Porque el gran G.K. jamás habría aceptado d estos «amores», y menos que sean algo «obvio por lo cual hay que desenvainar la espada». Por el contrario, G.K. habría desenvainado la espada por lo que sí es obvio y natural: la familia y el amor entre hombre y mujer; y, más bien, en contra de todas las corrientes que nos quieren pasar lo antinatural por natural. A ver listillos, una pregunta, si lo único que importa es el «amor» y nadie debe intervenir cuando este existe, ¿entonces, supongo, que debemo acepar que dos hermanos se enamoren, que el padre se enamore de su hija, la madre de su hijo; el que yo me enamore de mi mascota, a aquel que está enamorado del cadáver de su enamorada, etc.?

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      1. Rafael Quiroz, ve y mira la biografía de Chesterton, sobre todo su relación con George Bernard Shaw; tal vez aprendas algo de tolerancia allí.
        El resto de tu comentario no merece respuesta, ya que es todo una sola falacia. Arguementa con corrección y sin sarcasmo (el cual veo que te queda holgado) y luego, tal vez, merezcas una respuesta un poco más extensa que esta.

        Abur!

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      2. Si a los homosexuales se nos descartara de la sociedad por «no transmitir la mayor cantidad de material genético óptimo, indispensable para la continuación de la especie», siguiendo la misma lógica deberíamos sacrificar en la cuna a los niños con deficiencias intelectuales y a los ciegos, sordos, a enfermos de polio; de hecho en natura son las propias madres quienes abondonan a sus críos defectuosos, se sientan en ellos o se los comen directamente para ofrecer mayor aportación de proteinas a sus crías sanas, a las normales… somos natura y somos cultura y éste último detelle nos separa del resto de los animales. Hay muchas formas de contribuir al grande proyecto humano, más allá del apareamiento a fines reproductivos. Zopenco. Te dejo un enlace breve y sencillito, como tu forma mentis https://goo.gl/4YnVhG y paro aquí porque la verdad, comentar la segunda parte de tu delirio sería echar perlas a los cerdos (con perdón de éstos).

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  2. Hola bella! Comparto tus palabras, pero agrego otro porqué…..porque el deseo, eso que hace que nos sintamos atraídos por el otro con todo nuestro ser, eso, no es voluntario ni se puede modular, ni educar, ni dirigir…..las atracciones son y no pueden no ser…No se trata sólo de poder decidir qué hacer con lo que uno tiene entre las piernas, se trata de poder ser, ser sexuado con ese matiz de atraccion hacia el/la otro/a del mismo sexo, y eso implica la cabeza y el cuerpo entero. Muchos besos Amiga….te sigo leyendo en la.distancia y en silencio, pero te sigo. 😉

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    1. Preciosa Li, muchas gracias por pasar por aquí, con cuánto gusto te leo. Y sí, dices muy bien, el deseo no se domestica e involucra el cuerpo entero. Qué bien que lo señalas, gracias.
      Muchos abrazos con enorme enorme cariño.

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