Casi a la misma hora, hoy estarán en la sala de operaciones mi mamá y mi cuñado-que-es-más-bien-mi-hermano. En ambos casos se trata de ciurgías menores, pero igual.
Los pasillos largos como si no tuvieran nada más que hacer, la mirada incómoda de los familiares que esperan, el olor a medicina, el alegre carnaval de enfermeras y doctores. De todo eso tendré una probadita. De esa sutil propaganda que se hacen la muerte y su marido, el dolor, para recordarnos no solamente que somos mortales, sino que somos mortales de repente, sin mayor aviso. Que haya hospital de por medio o no, nadie puede estar seguro de qué va a hacer mañana.
Julia, que te sea leve
aunque uno tenga familiares con enfermedades que los lleven cada rato al hospital, los que no somos del mundo de la medicina, nos encontramos muchas veces tan ajenos a esos lugares
y las esperas… son tan largas, desde acá, te acompaño.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Qué lugares más deprimentes, porDios. Muchas gracias por la compañía…
Me gustaMe gusta
Bueno, querida; los mejores deseos para los tuyos. Es tranquilizador saber que son cirugías menores, así que imagino incomodidades varias (tanto para ellos como para ti) pero no mucho más que eso.
Claro está, la reflexión del final «nadie puede estar seguro de qué va a hacer mañana», es más que adecuada.
Un fuerte abrazo y ya sabes, siempre contigo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Mi mamá salió bien de quirófano, todo indica que mañana la dan de alta. Mi cuñado sigue en cirugía.
Muchas gracias, querido. Lo sé, no, más bien lo siento.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Que todo salga bien para ambos, Juls! Besos
Me gustaLe gusta a 1 persona
Va la mitad. Falta la otra mitad. De todas formas, aquí andamos. Muchas gracias, besos.
Me gustaMe gusta
Me alegra saber que todo salió bien, mi tocaya. Espero que siga mejorando. Un abrazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Las dos Julias estamos, hoy por hoy, bien y de buenas. Espero que tú, igual. Un abrazote. Más grande.
Me gustaLe gusta a 1 persona