El amor, esa pelea de box

Las relaciones de pareja y el ring tienen muchos puntos en común. Como boxeadores expertos, con frecuencia nos construimos un rival a modo, para darle sentido a nuestras manos. Somos el mejor publirrelacionista del adversario: le ponemos más virtudes de las que tiene, decimos que sus puños son de hierro, que es invencible en el ring. Así, incitamos el morbo.Sigue leyendo «El amor, esa pelea de box»