Me dijeron que subir a verlo requiere la abnegación de un santo… y se ve que además de mi hija y yo, hay miles de santos queriendo hacerlo a las 8:30 am de hoy. La fila para tomar el trenecito a la montaña Corcovado es, dicen, de unas tres horas. Un «muy amable» empleado del servicio de vans ofrece subirnos por «sólo» 50 reales por persona (unos 350 pesos mexicanos o 27 dólares). Muchos aceptamos de inmediato. Por ese precio supongo que nos llevarán a la coronilla misma de la estatua, pero tras apenas 15 minutos de un viaje atropelladísimo y rebotadísimo nos deja en la taquilla del monumento. Hay otros miles de abnegados-con-cámara-fotográfica haciendo dos filas: una para pagar 27 reales por persona (unos 190 pesos o 15 dólares) y la otra, eterna, para tomar oootro transporte hacia la cumbre. Me pregunto si mejor sería regresar, aunque nos perdamos el paraíso mismo. Decidimos seguir el trayecto: a estas alturas literales y metafóricas merecemos la canonización inmediata.
Hacemos lo que corresponde y luego de más de media hora por fin abordamos la segunda camioneta. Otro conductor frustrado de Fórmula 1 nos lleva a la cima. Ahí nos esperan unos 200 escalones atascados de turistas, 300 tiendas de souvenirs y, eso sí, varios miradores desde donde se ve Río a 360 grados alrededor. La vista es bellísima, única. Acabamos de subir y por fin estamos a los pies de la estatua.
Es muy impresionante. El efecto de sus 30 metros de altura es similar al de las catedrales góticas: hacer que uno se sienta minúsculo, que mire hacia arriba con reserva y hasta un cierto temor. Además, esta imagen rodeada de nubes y con los brazos extendidos parece venir flotando de las alturas.
Con toda seguridad, si hay un día de Apocalipsis va a comenzar aquí, con este Cristo cobrando vida y aniquilando con el dedo meñique a herejes como yo, que subimos hasta sus pies sólo a tomar fotos.


y supongo que con unos cuantos reales uno podría salvarse de las catástrofes del mundo. querida nos hace falta una foto panorámica del lugar, no la olvides si es que aún no bajas
Me gustaMe gusta