Lo que realmente es «dar la hora»

En la sala de espera, ella se acercó: «No traigo reloj. ¿Me das tu hora?» y él le dio todas y cada una del resto de su vida.

Publicado por Julia Santibáñez

Me da por leer y escribir. Con alta frecuencia.

Añade tus palabrasaflordepiel

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: