«Cuando le pides a una persona que salte, su atención se dirige fundamentalmente
al acto de saltar y la máscara se cae, de manera que aparece la persona auténtica», dijo alguna vez el fotógrafo Philippe Halsman, quien desde 1940 desarrolló una notable carrera.
La cita con la que abre este post revela su pensamiento, de modo que Halsman se dedicó a fotografiar saltando a cuanto famoso pudo. Me parecen imágenes geniales, frescas, divertidas, naturales en su artificio, sorprendentes por lo sencillas pero creativas. Me apetece hacer una versión musical de «La vida es mejor saltando» y, luego, ponernos todos a hacerlo. Seguro desaparece alguna arruga.
palabras a flor de piel 
Pequeñas sabidurías. De esas que de las que hay muchas dando vueltas y a las que poca atención les prestamos.
De las fotos que has puesto en el post me quedo con la de Audrey Hepburn; la expresión de su rostro refleja una alegría casi infantil.
Cariños.
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La de AH es fantástica, sin duda, pero no hagamos menos la de Brigitte: además de hermosa ella, la foto lo es también.
Abrazo
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Yo también quédome con Audrey, belleza angelical que en estas posturas que siempre son muy de niños luce preciosa.
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Ok, ok, no discuto el punto ni me pongo necia en reivindicar a Brigitte…
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Yo también me quedo con la imagen de AH. Era mi dibilidad; el amor imposible de mis años de juventud. Pero la Grace Kelly es más… digamos «sugerente»
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La de Kelly es deliciosa por donde se le vea (obvio, me refiero a la foto…).
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Me ha encantado esta entrada. Sé que no digo nada, pero es que estoy demasiado liado sonriendo 😉
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Pensé que estaba liado saltando…
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Eso cuando esté en un lugar con el techo más alto…
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Ok, concedido. Entonces tienes también tiempo de conseguir una cámara y registrar el momento (aunque no seas Brigitte Bardot).
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me gusto, es tan… transparente, sin mascaras.
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Así como lo dijo el propio artista, en efecto. Al «preocuparnos» por saltar (y no matarnos al caer!) nos despojamos de poses y gestos estudiados.
Saludos
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