«No temas la perfección. Nunca la alcanzarás». Lo dijo Dalí, muerto un día como hoy hace 25 años. Además de artista, loco, genio y mercadólogo de sí mismo, el nacido en Figueras dio en el clavo con esto. ¿Por qué, entonces, seguir afanándome por rozar lo perfecto? Es un dar vueltas sobre el mismo eje, infinito como su bigote…
palabras a flor de piel 
Daliniano de corazón y neuronal ! 🙂
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Pues tienes buen olfato, querido…
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😉
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Dalí fue, en mi adolescencia, mi pintor preferido (tan así es que, antes de volver a Argentina hice un viaje de 1.200 Km sólo para visitar el Museo Dalí de St. Petersburgh. No podía dejar de ver, aunque fuese por una vez en mi vida esas obras originales). Luego su sitio fue ocupado por otros, pero él no quedó en el olvido, siempre tuvo un lugar especial en mis preferencias (hago un repaso mental y sí, puedo asegurar que Dalí es el pintor del que más libros tengo). Lo que no muchos saben es que Salvador era un excelente escritor, y que sus libros son estupendos. En la fotografía de «Los libros del 2013» hay uno de ellos que releo constantemente: El mito trágico del Ángelus de Millet. Su Diario de un genio también es muy recomendable.
¡Qué hermosa locura, por Zeus!
Cariños. D.; y gracias por el bigote.
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Vaya, Dalí también fue un favorito de mi adolescencia! Es de los primeros pintores que ubiqué por nombre y mi papá me compró un libro de él cuando yo tendría unos 15 años, más o menos. Desde entonces lo cuento entre mis predilectos. No he leído nada suyo, quiero hacerlo en un futuro cercano.
Asumamos que somos locos, que negarlo no cambiará nada.
Abrazo
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Un autentico genio… recuerdo el «tete a tete» que tenia con Picasso: » Hay dos cosas malas que te pueden pasar en la vida, ser Picasso o no ser Dalí».
Impresionante 😉
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Buenísima cita, lo pinta de cuerpo entero!
Saludos…
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Acaban de emitir un reportaje con motivo del 25 aniversario de su muerte en La 1, se puede ver en mi último post. Sobre la perfección, creo que es innato que la busquemos, ignorando que es la imperfección lo que nos hace bellos y distintos, ¡como el bigote infinito de Dalí!
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Interesantísimo, gracias por el enlace. Me encantó lo de «decidí ser ligeramente multimillonario» (yo lo decidí pero no lo he logrado y es que, claro, no soy Dalí) además de «soy una droga». Lo veo completo por la noche…
Abrazo
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