Escribir es estar obsesionada por las puertas

captura-de-pantalla-2016-12-22-a-las-12-23-12

«Una tarde pudo comprender una poesía; era como si alguien, sin querer, hubiera dejado una puerta abierta y en ese instante ella hubiera aprovechado para ver un interior«. Lo dice Felisberto Hernández en el cuento «Las Hortensias», incluido en Las Hortensias y otros relatos (El Cuenco de Plata, 2011). Aunque me disgusta el uso de «poesía» como sinónimo de «poema», la imagen es precisa. Preciosa.

Me recuerda lo que señala Patrizia Cavalli, la poeta italiana, citada por Fabio Morábito en El idioma materno (Sexto Piso): el escritor (en especial, el de poesía) es una especie de cerrajero entrenado en abrir candados. Posee la conciencia de que los versos entrañan una dificultad real, similar a la de ser incapaz de abrir una chapa. Igualmente exacto, el concepto.

Coincido con ambas metáforas, cercanas entre sí. Me obsesionan las puertas. A diario, al escribir me enfrento a una de ellas, cerrada. Algunos días consigo abrirla.

Publicado por Julia Santibáñez

Me da por leer y escribir. Con alta frecuencia.

8 comentarios sobre “Escribir es estar obsesionada por las puertas

  1. La puerta es una de mis imágenes/metáfora favorita y aquí la has expuesto de manera magnífica, aunando diversos textos y puntos de vista que no hacen más que fortalecer a la imagen central. Me encantó la entrada.

    Abrazos.

    Le gusta a 1 persona

  2. ¿Quién tuviera la llave maestra para adentranos con palabras a las puertas cerradas? Bella entrada con unas métaforas que me dejan pensando:, ¿cuántas puertas nos quedan por abrir, cuántas permaneceran cerradas, dónde estarán llaves extraviadas? yo aún conservo la llave de la casa que habité en mi infacia y de la que ya han cambiado la cerradura….
    Abrazos Querida.

    Le gusta a 1 persona

    1. Qué padre simbolismo, tener la llave de la casa de infancia. Como para cantar o componer o escribir sobre eso.
      Y sí, la imagen de la puerta me encanta, sobre todo por las muchas lecturas que contiene. Tratar de abrir una cerradura sin contar con la llave suena a necedad (sí), a insensatez (también), a intentos fallidos (muchos), a la emoción de conseguirlo (apoconó).
      Besos.

      Le gusta a 1 persona

Añade tus palabrasaflordepiel

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: