5 a.m. Estoy de ese lado del día en el que todavía es de noche. En poco tiempo saldré a clase de yoga, pero invitada por el silencio aprovecho para leer un poco. Tomo el libro de meditación que es, literalmente, mi lectura de cabecera. Lo abro donde sea:
«Nuestros demonios personales tienen diversos disfraces. Los experimentamos como vergüenza, como celos, como abandono, como ira. Son cualquier cosa que nos haga sentirnos tan incómodos que tenemos que huir constantemente. Nos escapamos a lo grande: expresamos nuestras emociones reprimidas, gritamos, damos un portazo, pegamos a alguien o tiramos un tiesto para no tener que enfrentar lo que está ocurriendo en nuestro corazón […] Practicar el amor compasivo hacia nosotros mismos parece una buena forma de empezar a iluminar la oscuridad de los tiempos difíciles». -Pema Chödron, Cuando todo se derrumba (Gaia ediciones)
Justo hoy el día comienza entre estas páginas.
palabras a flor de piel 
Una buena reflexión para comenzar el día, sin duda. Que te sea provechoso. Un abrazo!
Qué temprano te levantas, ¿no?
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Sí, cuando hago yoga el día arranca muy muy temprano, querido, pero la recompensa lo vale…
Abrazote
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Es lo que estoy tratando de hacer…..
No se para los otros , que me tienen que aguantar , pero para mi es muy relajante y aliviador….
(Que encanto la lectura nocturna, pero lo lindo seria dormirse de nuevo después!)
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Sería muuucho más lindo dormirse después, sin duda, pero no está mal empezar el día en ese estado de ánimo.
Y sí, estoy aprendiendo a ser compasiva conmigo. Cómo cuesta a veces… Qué bueno saber que somos varios en el mismo intento.
Abrazo
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Reblogueó esto en El Ático del Alma.
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Una delicia despertarse entre páginas y… dormir después. Diría que es otra de mis pasiones (que me temo que cada vez son más).
Muchos besos desde este lado, Julia…
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Qué bien tener muchas pasiones, es sinónimo de estar llena de vida.
Besos muchos
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Pequeños placeres a deshora… Como pecados veniales y placenteros.
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La deshora le añade encanto a estos placeres, sin duda.
Un abrazo
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Qué buen comienzo. Seguro que no te despertó una ambulancia abriendose paso a golpe de sirena en una calle vacia, como a mi. Tengo que mudarme. Abrazo
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Bueno, el momento mismo de despertar no fue amable: la alarma del despertador en el oído. En ese sentido, nada que envidiarle a la ambulancia…
Abrazo
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Hermosa cita, aunque hay que reconocer que hay gente que te lo pone difícil ¿no? De todos modos hay que empezar el día como si todos hubiésemos leído el mismo texto y fuéramos a ponerlo en práctica (ay, iluso de mí…). Bueno, lo dicho: al menos hacer el intento.
Cariños.
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Sin duda es un reto mayor, pero me gusta plantearme la posibilidad de que pueda lograrlo un día. Ese horizonte a lo lejos me dibuja una sonrisa.
Abrazo
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