Lo que no quiero olvidar

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«Cuando tengo algo de dinero compro libros; si queda algo compro comida y ropa»
-Erasmo

Deliciosamente romántico, no lo digo ni lo quiero decir. Aunque gaste bastante en libros y sean parte toral de mi existencia, me parece que es un peligro olvidar que también fuera de ellos hay vida. Y no quiero que se me olvide.

Publicado por Julia Santibáñez

Me da por leer y escribir. Con alta frecuencia.

32 comentarios sobre “Lo que no quiero olvidar”

  2. Yo en una época viví con esa disyuntiva , ahora compro algunos ,visito bibliotecas, amables amigos me prestan algunos y ahora existe el bendito PDF , claro un libro entre las manos y propio siempre es mas delicioso, pero en efecto alimentándose de palabras la vida sabe mejor, Un abrazo.

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    1. Así es, pero además no quiero vivir solamente a través de libros, aunque me den mucha intensidad y riqueza, sino también de la relación con mi hija, con mi pareja, mis amigos y familia, conmigo misma!
      Abrqzo

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  3. Emulando lo que decía un personaje de Laura Esquivel en Como agua para chocolate: «No es por vicio ni por fornicio, sino por dar un librito más a tu servicio…»

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  4. Hubo un tiempo en que gastaba prácticamente cuanto tenía en libros hasta que empecé a vivir un poco máss la vida. Hay lugar para todo o, más bien, no hay lugar para todo.. así que me pone un poco de cada, gracias.

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    1. Entiendo que en España hay una red al menos decente, cosa que no pasa en México. Cuando yo estaba estudiando Letras frecuentaba muchísimo las bibliotecas de la universidad y me fascinaba hacerlo, pero fue la primera vez que supe lo que era «una biblioteca»…

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  6. Cuando he pagado el alquiler de mi casa, la tarjeta de transportes y el teléfono, gasto en dinero en libros. Y es verídico: durante este trabajando en Francia, he acumulado más de cuarenta libros que no he podido traer a España y se han quedado allí a sabiendas de que volveré en septiembre. Cuando vuelva definitivamente a mi país, no sé cómo voy a hacer…

    Besos.

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  10. Pues comprar libros es el único vicio que no pienso dejar. No llego al extremo de Erasmo, pero si salgo a hacer algún trámite o debo ir al médico, por ejemplo, a veces me obligo a recorrer aquellas calles que sé que no tienen librerías o. ni siquiera, puestos de diarios y revistas. ¿Tendría hijos Erasmo? Sí, ya sé, podría «googlearlo» y lo averiguaría; pero me gusta más la pregunta de lo que me interesa la respuesta.

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    1. No lo sé pero te garantizo que no tenía. Las prioridades lectoras (al menos, las mías) se vieron alteradas desde que llegó mi hija.
      Yo también me prohibo a veces asomarme a una librería, porque sé lo difícil que es no comprar algo. Pero claro que como vicio es el mejor. El post sólo resalta mi deseo de buscar un equilibrio: por más que los libros ayuden a vivir, no quiero que se me olvide vivir «la vida».

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      1. Cien por ciento de acuerdo (otra vez y van…) Además a veces leer demasiado paraliza, no te permite hacer otra cosa. En ese sentido, si uno lo deja (me ha pasado) leer es casi como mirar T.V.. No te idiotiza pero tampoco te deja crear.
        Libros e hijos. No está mal para pasar por este mundo ¿no? Y algunos besos también. Con eso me conformo y me puedo ir tranquilo.

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