«Lo más fácil en una novela es pecar de solemnidad, no contar nada y fingir que se cuenta».
«Una novela se inserta en la sociedad que la vio nacer cuando llena un vacío».
«Cuanto más cerca está un autor de terminar una novela, más alejado está de la vida».
«Una novela se parece a una mujer, en que provoca un vacío sin el cual no es posible vivir».
Con la lectura de aforismos inteligentes como estos (¿hay de otros?), Eusebio Ruvalcaba presentó anoche la reedición de Desde la tersa noche, publicada originalmente en 1994 y que en esta edición de NitroPress incluye textos críticos de Vicente Quirarte y Guillermo Arriaga, entre otros. Nombre bien conocido en las letras mexicanas, Ruvalcaba ha navegado por novela, ensayo, cuento, crónica, aforismo, poesía, dramaturgia, periodismo. En lo personal, he leído buenos cuentos suyos, me gustan sus aforismos y sus textos sobre música (es un maestro) y conozco algo de su poesía (no soy su fan).
Al final de la presentación, alguien le pregunta cuántas novelas ha publicado y él contesta: «Me siento abochornado de responder eso. No tiene la menor importancia el número, lo realmente importante es si con alguna pude tocar a un lector». Compro Desde la tersa noche porque no la he leído, porque quiero ver si me toca y porque me parece precioso decir que, igual que una mujer, provoca un vacío sin el cual no se puede vivir.
palabras a flor de piel 
Citas como estas son las que inspiran y marcan en el aprendizaje. Llenar un vacío con la novela como si esta fuera una persona me ha tocado más que un simple «procura tener algo que decir».
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A mí también me encantó el concepto, y si consideras que Ruvalcaba tiene más de 10 novelas publicadas y un montón de otros libros, el tipo sabe de lo que habla…
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