Hay golpes en la vida, tan fuertes… ¡Yo no sé!/
Golpes como del odio de Dios; como si ante ellos/
la resaca de todo lo sufrido/
se empozara en el alma… ¡Yo no sé!/
-César Vallejo
no me tengo en pie/
me rompieron los huesos uno a uno/
dolor en astillas rasga por dentro/
pero nada se ve/
sólo que soy una mujer de trapo/
descoyuntada/
sin voz/
me dejo poner donde sea/
(crujo en pedazos)/
y me siento a ver cómo el dolor me llena/
cómo la sangre inunda los ojos/
y tiñe cuanto veo//
el mundo se me llenó de huesos rotos/
pobres espantados de dolor/
mis amargurados/
mis remordidos/
mis más que nunca desamparados//
-Julia Santibáñez
palabras a flor de piel 
Me gusta, pero por Dios que triste. esa imagen me toca el corazon. saludos
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Hermosas tristes palabras
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¿Es tuyo el poema? Desgarrador.
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En tu sombra, los silentes huesos rotos, son pájaros de negra tesitura. Abrazos.
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Desgarrador, como dice la Beve. No hay otra palabra. No autobiográfico, no reciente al menos. Un abrazo.
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Los primeros versos que me aprendi de memoria de Vallejo y » me morire en Paris….» Y los repito cuando el dolor pesa, se adentra y desarma….
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Reblogueó esto en Lady Meg.
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Caracho. Uno se va por las galaxias para exorcizar dolores y cuando vuelve se encuentra con esto. Lo siento, debería haber estado aquí. No sé si hubiese servido de algo, pero a veces saber que hay alguien ahí, al alcance de la mano, ayuda mucho.
Cariños infinitos.
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Has expresado muy bien como te sientes.
Un fuerte abrazo y mucha fuerza.
Cristina
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Palabras ciertas; duras y dolientes
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Reblogueó esto en reinag59y comentado:
Me gusta mucho su pagina
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Triste y bello. Ahora que te releo constato que lo bueno es que estos dolores se olvidan como los de un parto. Tal vez por eso, o por pura adrenalina hasta se regresa a lancear a los mastodontes cornudos que pueden dejar descoyuntada a cualquiera. El riesgo es que al instigarlos existe la condena de perpetuar esa especie y de repetir historias.
Todo sea por la creaciòn poètica.
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En el caso de este poema no me refería a la creación, sino a un golpazo de la vida, que trataba de drenar un poco en versos, pero tienes razón en que me ha sucedido: vivir una experiencia dolorosa casi a propósito para poder vaciarla en palabras. No tengo remedio.
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