Ayer quise retomar la sanísima costumbre de los #MiércolesDePoesía, pero me fue imposible. Tuve que hablar del libro de Martín Caparros, El hambre, porque su crudeza no me dejó opción, de modo que por esta vez celebraré el #JuevesDePoesía. Para ello invito a la poeta cubana Carilda Oliver Labra, nacida en 1924 y que con este poema resume la exquisita confusión del deseo.
Me desordeno, amor, me desordeno/
cuando voy en tu boca, demorada;/
y casi sin por qué, casi por nada,/
te toco con la punta de mi seno.//
Te toco con la punta de mi seno/
y con mi soledad desamparada;/
y acaso sin estar enamorada;/
me desordeno, amor, me desordeno.//
Y mi suerte de fruta respetada/
arde en tu mano lúbrica y turbada/
como una mal promesa de veneno;//
y aunque quiero besarte arrodillada,/
cuando voy en tu boca, demorada,/
me desordeno, amor, me desordeno.
palabras a flor de piel 
Quiero desordenarme de ese modo y por esas causas. Bienvenido #DíadePoesía.
Beso desde el sur del continente.
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Sobre todo, querida, por esas causas.
Besos desde un México de tarde caótica
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La imagen y el poema van de la mano -hay que deustarlos como un manjar- No es lo que se lee o ve sino lo que sientes , mirar de frente el remolino que te dice anda ven
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¿No es esa justo la clave de todo poema, lo que genera en ti?
Un abrazo
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Un poema realmente hermoso. Hace del sexo pizpireto, juguetón, pícaro, risueño, delicia deseada. Realmente hermoso, sí, realmente hermoso. Gracias.
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Me gusta mucho y celebro que te guste también, Rafael. Que el fin de semana arranque en esa sintonía…
Abrazo
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Reblogueó esto en Luxnivolay comentado:
Un toque de erotismo, que no pornografía, me inspira el recuerdo de una misiva fugaz en los años que reinaba París, con su mano en alto señalando al cielo, yo como una tonta mirando al dedo, mientras la cólera de incendio comprendía un final: ahora desierto. Versos delicados que limpian mi baúl de polvo, como un dulce algodón de azúcar.
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guuuaaauuu viene ardiente la semana.
Bello!!
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Que así sea, amén!
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Wao! Solo eso diré
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De acuerdo contigo, no hay mucho más que decir ante tamaño texto de Oliver.
Saludos y gracias por pasar
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Llegue acá siguiendo el tuit de los malentendidos (obsesos, orificios, fecundo) y me seguí hasta encontrarme a Carilda. Qué buena sorpresa, danioska. A mí su ‘Discurso de Eva’ me sigue poniendo la piel chinita cada vez que lo leo.
Qué deleite es leerte.
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Carilda es muy buena y su «Discurso de Eva», extraordinario. Un día lo compartiré aquí, aunque sea largo.
Me encanta tenerte de visita, gracias.
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Carilda es una de mis escritoras preferidas… hay un poemario especial «Una mujer escribe», que te recomiendo. Ojalá y lo encuentres 🙂
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No lo conozco, me lo anoto para buscarlo.
Besitos
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