Se están cumpliendo 100 años del nacimiento de Marguerite Duras, otra pluma soberbia nacida en 1914, como Cortázar, Paz, Bioy Casares, Thomas, Parra (habría que averiguar qué conjunción de astros se dio ese año, para saborear por anticipado cuando las estrellas se vuelvan a acomodar igual).
Rescato desde el título de esta entrada algunos pasajes de su novela no-tan-famosa Los caballitos de Tarquinia (Tusquets), en la que dos parejas pasan sus vacaciones en una playa italiana. La reflexión sobre el amor total, absoluto, permea los diálogos de los personajes, sumiéndolos en contradicciones e incongruencias, poniendo bajo la lupa su aburrimiento y su común deseo de tomar vacaciones del ser amado. Sobre todo, los lleva a concluir que es imposible que una relación sustituya la expectativa total del amor. Muy pocas plumas son capaces de iluminar así la profundidad del alma humana. Por eso la Duras es la Duras.
«[…] la verdad es que me gusta esa mujer, aun cuando la detesto. […] No deja nunca de gustarme, aun cuando sería capaz de estrangularla».
«El sufrimiento es como la felicidad, de vez en cuando hay que cambiar de sufrimiento, si no se vuelve uno viejo y tonto».
«Ningún amor del mundo puede ocupar el sitio del amor».
«Para el amor no hay vacaciones, no existen. El amor hay que vivirlo totalmente, con su aburrimiento y todo; para eso no hay vacaciones posibles».
El amante… relato hermoso
Salu2
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Es impactante, no da respiro.
Saludos…
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De acuerdo, pero a los amores hay que vivirlos como si ello fuera posible; hay que entregarse como si la tarea no fuese vana. Viajar aunque sepamos que nunca vamos a llegar a destino. «»Allí donde estaba ella, allí estaba el paraíso» escribió Adán en la tumba de Eva (Mark Twain; El diario de Adán y Eva). Creo que ésa es la única manera.
Lo que dice Duras es totalmente cierto; pero no deja de ser una fortuna que, en el momento en que nos enamoramos, también perdemos algo de la capacidad de analizar fríamente.
Cariños, siempre.
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Por supuesto, el amor es eterno mientras dura. Lo que me sorprende de la Duras es su capacidad de poner en palabras lo que en la mayor parte de nosotros es sólo una intuición.
Abrazote
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El amor hay que vivirlo totalmente, con su aburrimiento y todo…, siempre, totalmente… Un saludo.
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Igual que la vida: si no tuviera «vacas flacas» no disfrutaríamos las vacas gordas.
Beso
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:))
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Reblogueó esto en Cultureando en Barinas.
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Marguerite Duras es de la escritoras que me cautivan, tanto por leer y tan breve nuestro tiempo…. Abrazos
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Es fantástica, tremenda. Y sí, hay tan poco tiempo…
Abrazo
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[¡Caramba con 1914! Y yo, tan oronda con mi coincidencia del 24 de agosto, volví a mi humilde realidad.]
La señora Duras, una de mis admiradas Margaritas, define el amor ideal: “Todo amor vivido es una degradación del amor”. Cuánto más admirable es el amor concretado. Y ni hablar de aquél que se sostiene en el tiempo.
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El concretado, sostenido y vivido a plenitud se acerca mucho (mucho) al ideal.
Abrazo
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