Te fuiste, doloroso de la sangre, artesano frágil, alquimista del juaneo y el gelmaneo, huérfano de hijo, palabrero exiliado, compañero del dolor tuyo y de todos. Cuánta falta van a hacer esos poemas tuyos que «dan vueltas por el cuarto». Cuánta. Te despido murmurando tu luz:
«Estoy sentado como un inválido en el desierto de mi deseo de ti./
Me he acostumbrado a beber la noche lentamente, porque sé que la habitas, no importa dónde, poblándola de sueños./
El viento de la noche abata estrellas temblorosas en mis manos, que aún no se conforman, viudas inconsolables de tu pelo./
En mi corazón se agitan los pájaros que en él sembraste y a veces les daría la libertad que exigen para volver a ti, con el helado filo del cuchillo./
Pero no puede ser. Porque estás en mí, tan viva en mí, que si me muero a ti te moriría».
de Violín y otras cuestiones, en Juan Gelman, Pesar todo. Antología (FCE)
palabras a flor de piel 
muy doloroso por cierto, para este argentino en el exilio, luchador como pocos, con esas importantes pérdidas que tuvo en su vida, por la acción de los perversos dictadores que asolaron nuesro país a fines de los ’70 y principios de los ’80 . Muchas gracias por el homenaje que le brindaste y si te gusta mira los míos
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Ya anduve por allá. Imperdible para todo amante del gelmanismo.
Abrazo
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En la foto, supongo, viene mal el año de la muerte.
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Claro, gracias. Ya corregido…
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Precioso homenaje y maravillosas sus palabras.
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Gelman es, sin duda, de los mejores poetas de habla hispana de todos los tiempos. Su partida es muy lamentable.
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Me encanto tu homenaje, siento su pérdida porque todo poeta es mundial. Un abrazo.
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Como dices, los poemas son de todos, y más cuando un autor supo llegar al alma como Gelman.
Abrazo
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Ahora que -como él mismo decía- se ha ido a tocar el violín a otro barrio, le recordamos y le añoramos. Precioso homenaje.
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Le añoramos desde lo más hondo. Va a hacer mucha falta.
Abrazo
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Ojalá su lucha y sus versos sirvan de ejemplo.
Un abrazo
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Bonitas palabras las que le dedicas. Un hermoso homenaje.
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El mejor homenaje es leerlo y recordarlo.
Abrazo
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Es cierto, el mejor homenaje es volver a su poesía. Abrazo
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A eso dediquémonos, que sus versos son rebanadas de luz.
Saludos
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Dios mío, es hermoso y triste!
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Muy hermoso y profundamente triste. Resumes bien a Gelman.
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Alguien dijo: «No hay color para el luto». Ahora podríamos decir que tampoco hay palabras, uno tiene la sensación de que ya todas las dijo él.
Alguna vez te dije que no era de los poetas que más me habían llegado, aunque algunos de ellos –lo cual es inevitable, sin duda la incapacidad era mía– me parecieron magníficos. Tengo algún volumen de su poesías (de los publicados por Página/12) y otro volumen con sus artículos sobre la guerra de Irak. Rescato, más allá del poeta, al hombre que luchó y sufrió como pocos los embates de la dictadura argentina. Es en ese sentido que siento profundamente su partida. Se fue uno de los nuestros, uno de la familia.
Cariños.
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A mí, muchos versos suyos se me han quedado grabados en la piel, en las entretelas. Es de mis poetas favoritos, lo leo con frecuencia y no deja de sorprenderme. En especial adoro la musicalidad de su poesía, los juegos de lenguaje, su humor y su dolor, su acercamiento a Santa Teresa y a la lírica sefaradí. Y claro que también me toca su muerte por lo que implicó su lucha personal, vuelta colectiva. Dices bien: siento que se fue alguien de mi familia.
Abrazo
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La poesía es algo tan sutil y subjetivo que, insisto, casi puedo asegurar que las pocas lecturas que he hecho de Gelman se deben a mi torpeza. Seguro que llegará el momento adecuado donde sus poemas se tornen más transparentes.
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Creo que así será: un día se encontrarán bajo la sombra de un olivo, se reconocerán y se quedarán hablando por horas, como dos viejos amigos.
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